"El futuro del desarrollo económico sostenible se basa en la cooperación entre todos los países del mundo, en la reestructuración industrial, el mejoramiento de eficiencia, la adopción de energías renovables y el reajuste de los actuales modos de producción y consumo", señaló Shafqat Kakakhel, subdirector ejecutivo de PNUMA.
En carta que dirigió a un reciente foro económico del municipio de Tianjin, Kakakhel afirmó que China se ha convertido en una gran economía en términos nominales del producto interno bruto, sin embargo, su impacto en el crecimiento global, la distribución de recursos, el comercio y la inversión causa consecuencias directas en todo el mundo.
El gobierno chino acelerará el establecimiento de un sistema de evaluación científica estándar sobre el consumo de energías, a fin de proteger el medio ambiente del país y construir una sociedad de ahorro energético, según Xie Fuzhan, director del Buró Nacional de Estadísticas.
"China está desempeñando un rol cada día más importante en el escenario internacional y está tomando mayor responsabilidad en la protección medioambiental y el desarrollo sostenible globales", subrayó Kakakhel.
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