miércoles, noviembre 29, 2006

Quieren generar energía con llantas de desecho

En las calles de León, en lotes baldíos y en el relleno sanitario, siguen acumulándose miles de llantas de desecho.

El Municipio no ha sabido qué hacer con ellas. En marzo de 2005 contrató los servicios de la empresa Promotora Ambiental S. A, (PASA), de Monterrey, para triturar más de 400 toneladas de llantas que estaban en el relleno sanitario El Caracol.

El nuevo director de Protección al Medio Ambiente, Mario Figueroa Trujillo, dijo que el proyecto más viable es utilizar las llantas para hacer material que utilizan las fábricas de cemento para pavimentar calles.

Las autoridades estiman que en León circulan alrededor de 300 mil vehículos, más cerca de cien mil que se suman a la circulación cada año, y se calcula que generan más de cien toneladas de llantas por año.

Mario Figueroa reconoció que las llantas son una preocupación para la dirección. Luego, añadió que recién regresó de Monterrey, donde se analizaron varios proyectos para determinar qué hacer con las llantas.

Entre los proyectos viables es convertirlas en energía, a través de una costosa tecnología japonesa, o bien hacerlas polvo y ese material utilizarlo en la industria cementera.

Juan Manuel Hernández, quien tiene a su cargo una ruta de camiones recolectores de basura, reconoció que les tienen prohibido levantar llantas y desechos de talleres, como estopas.

“Si los llevamos al relleno no nos pagan el viaje”, añadió.

Estimó que un 80 por ciento de las llantas de desecho van a parar a tiraderos a cielo abierto, baldíos, arroyos y canales de aguas negras.

Los propietarios de vulcanizadotas y llanteras, prefieren tirar los desechos, antes que pagar 94 pesos por cada tonelada que llevan al relleno sanitario.

“No sólo son los 94 pesos, hay que pagar el flete, y un viaje de cien llantas cuesta hasta 850 pesos”, dijo Mario Cruz, quien tiene una vulcanizadota en la colonia Bellavista.

El anterior director de Protección al Medio Ambiente, Sabino Rodríguez, señaló en el mes de agosto pasado, que las 400 toneladas de llantas que se trituraron y que se encuentran confinadas en el relleno sanitario, no se ha encontrado cliente para su aprovechamiento.

“Venderlas a alguna cementera, para hacer material para carreteras, implica un alto costo y no es rentable, por ello estamos viendo el proyecto japonés para utilizar las llantas como material y generar energía”, añadió Sabino en dicha ocasión.

El funcionario negó que las llantas que fueron trituradas estén confinadas en forma definitiva. “Ahí están para cuando se les pueda dar una utilidad práctica en beneficio a la comunidad”.

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